Una de las ventajas de utilizar una cosmética personalizada
con aceites esenciales es que puedes ir adaptando tu crema a las necesidades de
tu piel en cada momento.
Nuestra piel se renueva y se adapta constantemente al medio
externo e interno, basta un trastorno nervioso o emocional para que súbitamente
la piel reaccione al instante. El estado nervioso es de vital importancia en la
salud y el aspecto de la piel. Tampoco tiene las mismas necesidades nuestra
piel en verano que en invierno, en un clima seco que húmedo.
Hay la teoría de que la piel se acostumbra al uso reiterado
de un producto, yo estoy de acuerdo con esto en algunos casos, y sí, es cierto
que no es bueno abusar de ninguna
sustancia sea natural o no, por eso ante la gran variedad que nos brinda la
naturaleza de aceites esenciales, siempre utilizamos los que más nos convienen
en cada momento.