miércoles, 4 de marzo de 2015

La Gripe y los Aceites Esenciales

¡¡¡Con este frío  llega la dichosa gripe !!!,  pero también es verdad que si te la tomas con algo de filosofía, puedes aprovechar la ocasión de padecerla  para cuidarte y mimarte un poquito, haciendo un parón en la vida cotidiana con reposo y dieta obligados. 
De todos es sabido que con la gripe hay que armarse de paciencia y dejar pasar el proceso de entre 8 y 10 días.
No hay nada que cure la gripe y todos los tratamientos son paliativos pero podemos aliviar los síntomas de varias formas  y los Aceites Esenciales son un gran aliado, ofrece soluciones eficaces y placenteras.
Al primer síntoma de la gripe, toma un baño caliente con 10 gotas de Aceite Esencial de Ravintsara , Eucalipto Radiata o Árbol de té disueltas previamente en sal marina y vete directo a la cama.
Date 2 veces al día un masaje en la nuca, pecho y planta de los pies con un aceite a  base de 25 ml  de Aceite vegetal de Almendras o Pepita de uva y 4 gotas de Árbol de té, Eucalipto y Clavo.
Puesto que la gripe es muy contagiosa, es bueno poner un quemador de esencias en casa con unas gotas de Pómelo o Romero, mantendrá una buena desinfección ambiental.
Para aliviar la congestión nasal, haz inhalaciones con vahos de agua caliente y unas gotas de Niaulí, Eucalipto  y Árbol de té.
Si no puedes dormir... prueba a poner 2 o 3 gotas de Lavanda en la almohada.

Bueno… ¡¡¡abrigarse y a cuidarse toca!!!

martes, 3 de febrero de 2015

La Importancia de una Piel Hidratada.


Nuestra piel está protegida por el manto hidrolipídico. Una combinación de lípidos, ceramidas y agua. Diversos factores tanto extrínsecos (detergentes, climatología) como intrínsecos (alimentación desequilibrada, enfermedades, ingesta insuficiente de líquidos) pueden hacer que esta emulsión se separe, es decir, el agua se evapora dando lugar a una piel deshidratada. 
Las pieles deshidratadas se presentan,  un tanto ásperas al tacto, ligeramente enrojecidas, descamadas y con sensación de tirantez, incluso picor. 
La deshidratación puede darse tanto en pieles grasas como en pieles secas.  No obstante es bien cierto, que las pieles grasas suelen sufrir más número de veces esta anomalía, debido a una mayor tendencia al uso de limpiadoras jabonosas y al no uso de cremas faciales, por no engrasar más la piel. 
El éxito de una piel sana, bonita y equilibrada, pasa porque  esté hidratada.
La hidratación es fundamental, en cualquier tipo de piel o edad.
Escojamos una limpiadora de acuerdo a nuestro tipo de piel. En general los aceites como el de jojoba u oliva en pieles secas cumplen muy bien esta función. Por otro lado, los jabones artesanos hechos también con aceites vegetales, gustan mucho en pieles  mixtas o grasas.
Después de utilizar un producto de limpieza en nuestro cutis, aunque  sea suave, el ph de la piel se altera y conviene devolverle su punto neutro. Si no aplicáramos seguidamente una hidratante, de forma natural la piel tendería a formar más ácido para regularse. 
Es fundamental el uso de una crema, emulsión o aceite que hidrate, nutra y proteja nuestra piel.
Aceites de almendras dulces, argán, aguacate para pieles secas o delicadas y el aceite de jojoba, avellana o  el gel puro de aloe vera, son los más indicados para hidratar las pieles grasas.

Las emulsiones The Theresa, cumplen perfectamente la función de hidratación, ya que además de ricos aceites vegetales, se les añaden aceites esenciales potenciando así sus funciones.

miércoles, 21 de enero de 2015

Aceite de Nuez de Albaricoque

aceite vegetal de albaricoque


Este Aceite Vegetal  extraído en primera presión en frío de las pequeñas almendras contenidas en el hueso del albaricoque, es excelente para el cuidado del rostro y su belleza. Muy rico en vitamina A y ácido linoleico, el aceite de hueso de albaricoque tiene muchísimas propiedades, aporta luminosidad y resplandor a la piel apagada, marchita y estresada, sin dejar grasa o aspecto brillante en la piel. Muy penetrante el Aceite de hueso de albaricoque es de muy buena tolerancia para todo tipo de piel. Es tonificante, nutriente, hidratante, revitalizante y suavizante. Es la base de todas las sinergias para iluminar el rostro.

Puede usarse como sustituto a una buena crema de noche en cualquier estación del año, también como desmaquillante. Ni el maquillaje más tenaz se resiste a su aplicación, limpia en profundidad cara y ojos vertiendo unas gotas en un algodón humedecido en agua .