martes, 3 de noviembre de 2015

Macarilla facial deTé verde o Matcha

mascarilla facial de polvo de té Matcha















El Té Verde es sinónimo de bienestar, armonía, belleza y serenidad. Ha sido utilizado desde tiempos ancestrales en la preparación de ungüentos y remedios naturales y presenta unas fantásticas características para ser utilizado como ingrediente en cosmética. Es uno de los métodos naturales para retrasar el envejecimiento y que la piel esté luminosa y radiante.
El Té Verde Matcha, es una de las variedades del té verde y sin duda la que más beneficios aporta al cuerpo humano. Es 10 veces más potente que el té verde normal. Contiene alrededor de 70 veces más antioxidantes que el zumo de naranja y 9 veces más betacaroteno que las espinacas, por su contenido de polifenoles antioxidantes,
Tomado en infusión es efectivo para quemar grasa corporal y es un buen estimulante natural del metabolismo.
A continuación vamos a preparar una mascarilla facial con este magnífico polvo de té verde y le añadiremos unas gotas de Aceites esenciales.
Para la preparación:
2 cucharadas soperas de polvo de té.
15 ml de Hidrolato de Rosas ( piel maddura) o Azahar ( piel grasa-mixta).
2 gotas de Aceite esencial de Lavanda o Palmarosa (piel grasa).
Le vamos a ir añadiendo el hidrolato al polvo de té hasta que tome una consistencia cremosa que nos permita aplicarla. A continuación le añadiremos los aceites esenciales, también podemos añadir algunas gotas de Aceite vegetal de Rosa Mosqueta o Aguacate para hacerla más nutritiva. La dejamos actuar unos 10 o 15 mn y la retiraremos con unas esponjas húmedas.
¡¡Veréis que piel tan bonita queda!!

domingo, 27 de septiembre de 2015

Peeling con Aceites Esenciales

Peeling con Aceites esenciales, receta casera














En pieles secas, apagadas, con falta de brillo y vitalidad es muy útil una buena exfoliación peeling para ayudar a retirar las células muertas, eliminar toxinas y mejorar el drenaje linfático.
Los Aceites esenciales también nos van a ayudar a devolver la luminosidad al rostro,
A continuación os propongo una receta casera muy fácil de preparar, podemos elaborar un peeling casero con:
1 cucharada de Aceite vegetal de almendras.
1 cucharada de azúcar de caña o sal marina fina.
Añadir 1 o 2 gota del Aceite esencial que más te guste; te propongo alguno de los 3 siguientes:
Aceite esencial de Limón,(aclara la piel y mejora las manchas pigmentarias)
Aceite esencial de Romero verbenona,(cierra el poro dilatado)
Aceite esencial de Salvia,(descongestivo).
Mezclar bien y aplicar sobre el rostro dando pequeños círculos suavemente.
Retirar con abundante agua.
Finalmente puedes tonificar con hidrolato de rosas.


martes, 8 de septiembre de 2015

El Contorno de los Ojos


lineas de expresión, aceites esenciales




















Vamos dejando atrás el verano y con el también el Sol y la Playa.
Si hemos tomado el sol y nos hemos reído mucho llegamos a puertas del otoño con una zona del rostro especialmente marcada . El Contorno de los ojos.
Las personas que son muy expresivas y  ríen mucho suelen tener más marcadas estas líneas.
Esta zona tan sensible por reflejar nuestras expresiones requiere un cuidado especial para prevenir y mitigar las arrugas o “patas de gallo”, Los Aceites esenciales son buenos aliados.

 Puedes hacerte un preparado específico para esta zona mezclando aceite de Argán y Onagra a partes iguales (10 ml) y añadir 2 gotas de Jara, Mirto y Siempreviva, mézclalo bien y aplica 1 gota del preparado dando un suave masaje con suaves toquecitos todas las noches con la piel bien limpia, con cuidado de que no penetre el producto en el interior de los ojos.
El párpado superior suele ser una zona grasa, por eso no es necesario aplicar el producto en esa zona.
Jara, Mirto y Siempreviva son 3 aceites esenciales de LUJO.  Suelen estar presentes en todas las fórmulas regeneradoras, cicatrizantes, para pieles maltratadas y en los tratamientos cotidianos contra la formación de arrugas y líneas de expresión

  Los olores son más seguros que los sonidos
o las imágenes para quebrar los hilos del corazón.
Rudyard  Kipling.